Alexander “Popeye” Mejía realizó una soberbia presentación la noche de este sábado en Guatemala. El joven que además de boxeador es campeón Fedelatin, trabaja cargando bloques, vende mangos y también golosinas, logró su victoria décimo tercera en el boxeo profesional al noquear al mexicano José “el Pingüino” Rojas, quien era dirigido por Nacho Beristáin. Popeye lo envió a la lona en el tercer asalto con un volado de derecha, a pesar de la contundencia del golpe, el réferi no contó la caída, pero segundo más tarde no tuvo otra opción que detener el combate, defendiendo con éxito su cetro.
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Popeye no cuenta con una pegada abrumadora, pero tira golpes como si tuviera cuerda infinita. Así fue como terminó desesperando, abrumando y venciendo al rival azteca. Rápidamente Mejía se adueñó del ritmo del combate y aunque en un principio la guardia zurda del rival lo desequilibró un poco, hizo los ajustes e implantó su sello.
Por otro lado, Giovanny “Baby face” Gutiérrez es una joven promesa con grandes proyecciones. Tiene fuego en los puños y no le gustan los rodeos. Salió desde el primer asalto a liquidar al guatemalteco Luis “el Macho” Recinos, quien soportó el calvario inicial. Le hizo sentir su golpeo desde la primera campanada y en el segundo asalto lo mandó a dormir. Baby Face se ganó al público chapín al ser todo un caballero y llegar a levantar a su oponente de la lona, lo cual lo hizo merecedor de aplausos y muchos elogios. Llegó a cinco nocauts y seis triunfos sin derrotas.
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